Escribo para soportar ausencias aquellas que surgieron de las canciones, de las calles donde apareciste, de los edificios donde nos quedamos niños, donde el tiempo era importante, pero no tanto, donde las consecuencias eran inventos de otros, con razones de otros, y las ausencias también eran de otros.
Todas parecen hoy nuestras.
Razones, ausencias, tiempos y segundos atrapados entre el tráfico que corre denso.